La Casa Blanca ha anunciado que actualizará el sistema de regulación de productos biotecnológicos. La primera normativa fue creada en 1986 y su última actualización se realizó en 1992, un marco coordinado para regular la política sobre la seguridad de productos biotecnológicos en Estados Unidos. Una normativa de gran relevancia para el sector agroindustrial y es que, según el New York Times, más del 90% del maíz, la soja y el algodón cultivados en Estados Unidos son modificados genéticamente a través de procesos biotecnológicos.
Pese a que la normativa actual garantice la seguridad de los productos biotecnológicos, esta revisión busca que la complejidad del conjunto de reglamentos desarrollados por las tres agencias federales con jurisdicción sobre productos de biotecnología sea más comprensible por el público. Se intentará que la evaluación de seguridad de los productos biotecnológicos sea más clara para todos los agentes, ya que los proceso de regulación de estos productos puede llegar z ser excesivamente difícil.
Se pretende así garantizar la confianza pública en el sistema regulatorio, mejorar la transparencia, la previsibilidad, la coordinación y la eficiencia en el sistema regulador, y alentar y apoyar la innovación en el área de la biotecnología. Para ello la Administración actualizará el marco coordinado aclarando las funciones actuales y responsabilidades en el proceso regulatorio de la EPA, USDA y la FDA. Con esto se busca aclarar las responsabilidades de cada organismo y cómo trabajan coordinadamente para la evaluación de dichos productos.
Además, la Administración encargará un análisis independiente sobre el panorama futuro de los productos biotecnológicos. Ya se ha pedido a las Academias Nacionales de Ciencias, Ingeniería y Medicina que realicen este análisis. La revisión será clave para la elaboración de políticas futuras. Debido al rápido avance de la biotecnología, un análisis externo de este tipo se realizará al menos cada cinco años.
[FUENTE: Pesticide law and policy blog]