Dos nuevas variedades de maíz transgénico resistentes a sequía se producen actualmente en África subsahariana para hacer frente a los efectos devastadores del cambio climático. Según informa E&E Publishing, ambas variedades son resistentes a sequía pero, una de ellas, está mejorada para incrementar su rendimiento. El cultivo de estas variedades de maíz transgénico supone una esperanza para las 300 millones de personas que sufren hambre en todo el continente.
El transgénico de esta variedad proviene de una bacteria común, Bacillus subtilis, que se encuentra en la tierra. Ésta y el maíz tienen genes comunes gracias a la proteína CspB, que ayuda a los organismos a adaptarse al estrés.
Estas variedades de maíz transgénico se encuentran actualmente en proceso de regulación antes de que pueda llegar al mercado, lo que se espera pueda ocurrir en siete años.
Sylvester Oikeh, director del proyecto de agua eficiente de maíz para África (WEMA), ha expresado su alarma ante los impactos negativos del cambio climático en el contintente. El aumento de la temperatura, la sequía y el aumento de la salinidad del agua son sólo algunos de los efectos temidos del cambio climático en la agricultura.
El maíz transgénico, desarrollado por Monsanto, se espera que aumente el rendimiento en un 30% superando los efectos del cambio climático.
[…] Para analizar esta situación y el papel de los cultivos transgénicos ante esta realidad, el diario ABC ha publicado en su edición digital un completo artículo en el que se exponen las últimas investigaciones realizadas en ingeniería genética para hacer frente a este reto. […]
[…] Los ensayos a campo toman como base los estudios e investigaciones realizadas en 2009 tanto en Kenia como en Tanzania en los que se estudiaron en laboratorios estas variedades de maíz resistentes a sequía. Según el científico James Gethi, “los ensayos de 2009 sirvieron para ajustar los procedimientos para los ensayos de campo en 2010. Los resultados demostraron que se pueden hacer los ensayos con transgénicos de forma completamente segura, y evaluar así el potencial de las variedades tolerantes a sequía”. […]