Cada gota de agua de mar está repleta de vida microscópica. Pero investigadores europeos creen que un tipo en particular podría ser la respuesta a los problemas más apremiantes del planeta. Las microalgas, que son invisibles para el ojo humano, tienen el potencial de hacer que la agricultura sea más sostenible y ser una alternativa al plástico.

Investigadores europeos han encontrado cepas de microalgas que pueden purificar las aguas residuales locales mientras producen fertilizantes y otros productos importantes para los agricultores. Gabriel Acién, catedrático de ingeniería química de la Universidad de Almería (España) ha explicado que estas microalgas “aportan propiedades bioestimulantes para la producción de alimentos en la agricultura”.

Además, explicó que “también aislamos más o menos diez microorganismos diferentes que pueden actuar como biopesticidas y controlar hongos, insectos y otras enfermedades en los invernaderos sin usar ningún químico, solo las moléculas naturales obtenidas de las microalgas”. A través de los proyectos financiados por la Unión Europea (SABANA, del que Gabriel es coordinador de proyecto, y ALGAENAUTS, una empresa biotecnológica local) se ha desarrollado una gama de productos agrícolas comerciales elaborados con ingredientes de microalgas.

Joaquín Pozo Dengra, director de I+D de la empresa Biorizon Biotech y coordinador de ALGAENAUTS, ha explicado que “hay que tener en cuenta que para 2030 debemos eliminar los compuestos químicos en la agricultura para conseguir una producción de alimentos sostenible y saludable”. Con ese objetivo las investigaciones en torno a las microalgas juegan un papel clave. 

Hoy, las microalgas pueden ayudar a las economías costeras a evolucionar hacia una mayor sostenibilidad, protegiendo el océano de la contaminación y otras amenazas. Más información en EuroNews Green y eComercio Agrario.

Compartir en redes sociales