El pasado 29 de mayo tuvo lugar la jornada “Biotecnología y Genómica Agroforestal en la Empresa: Retos Futuros” en el Salón de Actos de la Escuela Técnica de Ingenieros Agrónomos de la Universidad Politécnica de Madrid. Allí, los expertos reunidos intentaron dar a conocer una visión de la empresa desde un punto de vista poco frecuente: el impacto que la Biotecnología y la Genómica tienen en los procesos productivos de otros sectores como el agroalimentario, el forestal o en la salud.

Para abordar este tema, la jornada se dividió en tres bloques informativos que profundizaron en este tema  desde diferentes ópticas. En primer lugar, se presentó la visión que se tiene desde diferentes asociaciones empresariales como la Asociación española de Empresas Biotecnológicas (ASEBIO),  la Asociación para el Fomento de la Investigación y el Desarrollo Tecnológico en Genómica Vegetal (INVEGEN), y la Confederacioñon de Cooperativas Agrarias de España (CCAE). Todas ellas aportaron una perspectiva general sobre sus empresas asociadas y analizaron el potencial que aporta la biotecnología a las mismas basándose en su experiencia.

En esta línea, Concepción Novillo, miembro de Monsanto, y Cristina Magaña, miembro de Syngenta, explicaron el funcionamiento de las principales actividades de sus empresas, las más importantes del sector, incidiendo en el impacto que las nuevas tecnologías tienen en la productividad y los planes de desarrollo que pretenden llevar a cabo en un futuro próximo.

Para finalizar, Arístides Senra, responsable del Área de creación de empresas de la Universidad Politécnica de Madrid, y Fernando Carvajal, miembro de Peñafort Abogados, analizaron los pasos necesarios para crear una empresa. En esta exposición intentaron animar a los futuros emprendedores aportando posibles buenas ideas de negocio que puedan ayudar a superar los diferentes retos a los que se ven expuestas las empresas de este sector. Entre estas aportaciones se encuentran la adquisición y utilización eficiente de las nuevas tecnologías, el superar las barreras sociales para el desarrollo de la biotecnología, y en muchos casos los problemas para acceder a financiación por inversores privados o fondos de capital riesgo.

Fundación Antama ha podido hablar con el coordinador de la jornada, Antonio Molina, quien nos ha dado una innovadora perspectiva sobre la biotecnología.

¿En este momento, para usted, cuales son los principales retos a los que ven expuestas las empresas que giran en torno al sector biotecnológico?

Las empresas de este sector tiene diferentes retos. Entre los mas importantes se encuentra la adquisición y utilización eficiente de las nuevas tecnologías, intentar superar las barreras sociales de desarrollo de la biotecnología, y en el caso de las empresas “starting up” el acceso a financiación.

¿Hay optimismo para los productos modificados genéticamente? ¿Por qué cree que se está cercando este tipo de productos? ¿Qué intereses hay detrás de esta decisión?

El futuro de las plantas modificadas genéticamente es indudable, tal y  como lo demuestran cada año los informes que publica el ISAAA con las cifras de Hectáreas cultivadas con OMGs. El cerco a estos productos deriva de un desconocimiento, quizás interesado, de las nuevas tecnologías, pero también de la agricultura. Es difícil determinar que intereses hay detrás de estas decisiones, aunque parece obvio es que muchas de ellas se toman basándose en otro tipo de criterios, como el socio-políticos, dejando a un lado los argumentos científicos. Esto es particularmente grave, especialmente sabiendo el impacto que la subida de los precios de los alimentos están teniendo sobre un sector muy relevante de la sociedad con un poder adquisitivo bajo.

Los nuevos conocimientos y tecnologías pueden permitir la producción de más alimento sin incrementar la superficie cultivada, reduciendo además el impacto sobre el medio ambiente. De este modo, el intentar frenar este desarrollo puede tener unas consecuencias difícilmente cuantificables sobre los sectores menos favorecidos de los países desarrollados, pero sobre todo de los países mas pobres.

¿Cree que hay suficientes ayudas e inversiones para la investigación de la biotecnología?

Las ayudas públicas se han incrementado de forma significativa en los últimos años, y esperamos que la financiación mejore aun más. Es importante decir que se ha considerado la Biotecnología, como una Acción Estratégica más dentro del nuevo Plan de I+D+i del Gobierno de España.
En estos momentos, el principal problema reside en la deficiente financiación de empresas Bio por inversores privados o fondos de capital riesgo. Sin embargo, esta situación parece que está mejorando.

Tal y como está la situación, ¿cuál será el futuro próximo de los OGM?

Es muy importante que no se ponga cerco a la inversión en Biotecnología, ya que no nos podemos permitinos perder este tren. Creo que el futuro de los OMGs es prometedor, y en los próximos meses se debatirá mucho en Europa sobre este tema.

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