maiz escocia prohibicionUn total de 28 organizaciones científicas han expresado a través de una carta conjunta su preocupación por la prohibición de cultivos modificados genéticamente en Escocia. La carta está dirigida a Richard Lochhead, el secretario del gabinete escocés sobre asuntos rurales, alimentos y medio ambiente rechazando la medida adoptada el pasado 9 de agosto de prohibir la siembra de maíz Bt, el único cultivo biotecnológico cuya siembra está aprobada en la Unión Europea.

El dictamen escocés también matizaba que prohibirá también el cultivo de otros seis cultivos transgénicos que actualmente evalúa la Autoridad Europea de Seguridad Alimentaria (EFSA) si llegaran a aprobarse. Una medida cuyo objetivo formal han declarado es el de “proteger y mejorar aún más la imagen de estado verde y limpio”. Las organizaciones científicas alertan sobre el envejecimiento de la agricultura y el riesgo de limitar la investigación escocesa con medidas como ésta.

Las organizaciones científicas firmantes de la carta afirman que “hay variedades biotecnológicas que se encuentran actualmente en proceso de desarrollo que podrían beneficiar notablemente a los agricultores y consumidores escoceses, así como el medio ambiente. Un ejemplo es el caso de las patatas transgénicas que permitirían la reducción del uso de fungicidas. O las semillas oleaginosas enriquecidas con omega-3 que podrían proporcionar una fuente más sostenible de alimento para las criaderos de salmón”.

Los firmantes, entre los que se encuentran la Royal Society of Edinburgh y la British Society of Plant Breeders, han pedido una reunión urgente con Richard Lochhead para poder hablar sobre los cultivos transgénicos desde un punto de vista científico, en base a evidencias científicas. Por su parte, el secretario del gabinete escocés ha confirmado que se reunirá con ellos y que, aunque prohíba el cultivo de transgénicos no frenará el impulso de la investigación biotecnológica en Escocia.

La carta alerta del peligro de dejar a Escocia sin acceso a las innovaciones agrícolas que están haciendo a los agricultores de todo el mundo su actividad una práctica más sostenible y rentable. “Las políticas basadas en la ignorancia y no en el asesoramiento científico dejarán a Escocia sin lo que necesita para desarrollar su agricultura y mejorar el medio ambiente”, resaltan.

[ FUENTE: Sense about Science ]

Compartir en redes sociales