La Unión de Pequeños Agricultores y Ganaderos (UPA) organizó el pasado viernes una nueva jornada informativa en Palencia sobre ‘Agricultura competitiva y sostenible’ en la que se abordó la situación de la remolacha ante la reforma de la PAC, la biotecnología aplicada a la agricultura, y la reforma de la PAC. En el acto, en el que participaron más de 150 agricultores de la comarca, se defendió la coexistencia de cultivos y se criticó las políticas de la Unión Europea que prohíben cultivar transgénicos cuya importación está permitida.
En la jornada, UPA-Palencia defendió la coexistencia de cultivos convencionales, ecológicos y transgénicos, tres formas de cultivo totalmente compatibles, complementarias y necesarias. Se quiere así asegurar el derecho de los agricultores españoles y europeos puedan competir en condiciones de igualdad a nivel mundial.
En este contexto, la organización agraria criticó las políticas europeas que están estableciendo barreras comerciales motivadas por intereses particulares que impiden el avance de los cultivos transgénicos en el marco comunitario. La ausencia de argumentos científicos para estas prohibiciones es lo que hace que en la Unión Europea no haya problemas para consumir transgénicos pero sí para producirlos.
Para UPA-Palencia los cultivos transgénicos son una herramienta necesaria para el agricultor para hacer frente a grandes retos agrarios que amenazan cada vez más fuertemente la viabilidad de su actividad.
El bloque de biotecnología agraria contó con las ponencias de Lucía Roda (Ministerio de Agricultura, Alimentación y Medio Ambiente), Ignacio Eseverry (agricultor de Zaragoza representante de la Asociación PRObio), Carlos Vicente (Director de sostenibilidad para Europa de Monsanto), y Soledad de Juan (Directora de la Fundación Antama).
Los ponentes analizaron la evolución de los cultivos transgénicos en el mundo, el marco legal en la Unión Europea, los beneficios de la biotecnología agraria desde un punto de vista de competitividad y sostenibilidad, así como la experiencia de los agricultores tras más de 11 años de siembra.
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