Coalicion de los ignorantesEn pleno debate sobre las políticas europeas sobre organismos modificados genéticamente (OMGs), el periodista y pensador francés Guy Sorman ha publicado una columna de opinión en el diario ABC en la que critica duramente a la que califica “coalición de los ignorantes”, aquellos que han rechazado el consenso científico en temas tan importantes como los OMGs para defender la “naturaleza inmutable por encima de las necesidades de la humanidad”. Un texto de obligada lectura en el que se reflexiona sobre la paradójica situación que vive la biotecnología en la Unión Europea.

Tomando las prohibiciones de diecisiete países europeos de los OMGs, Guy Sorman comienza su columna haciendo una pregunta clave: “¿Quién invertirá en la ciencia desde el momento en que su aplicación esté prohibida?“. Y es que según reconoce el periodista, llama la atención que un continente entero haya decidido excluirse voluntariamente del futuro. “Los OMGs constituyen la primera fase de una revolución científica que empezó hace treinta años en Europa y en Estados Unidos”, explica.

En esta línea deja claro que la oposición a los OMGs no responde a evidencias científicas, “este rechazo es una opción totalmente ideológica que no obedece a ningún criterio científico (…) los OMGs nunca han provocado el más mínimo accidente ni han afectado a la naturaleza”. La decisión de los gobiernos europeos que los prohíben los OMGs en sus fronteras viene dictada por el “grupo de presión más oscurantista entre los ecologistas”, los que “colocan a la naturaleza inmutable por encima de las necesidades de la humanidad”.

Un sector vede que, pese a ser marginal en política, es “bastante decisivo y ruidoso como para cambiar una decisión y acosar a los medios de comunicación”. Y es que pese a este rechazo formal de diecisiete países, Guy Sorman recuerda que “a la apatía de los gobiernos se suma la hipocresía, porque Europa importa treinta millones de toneladas al año de soja y de maíz transgénico de Norteamérica, Brasil y Argentina para alimentar al ganado y a la industria conservera”.

El periodista cierra su texto recordando que “por mucho que la coalición de los ignorantes prohíba los OMGs (en la Unión Europea), la biotecnología seguirá adelante, pero en otra parte. Mala suerte para la investigación, la industria y el empleo en nuestro continente”. El artículo fue publicado el lunes 2 de noviembre. El texto íntegro está en la hemeroteca virtual de Almendron.com.

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