El Ministro de Agricultura chileno, José Antonio Galilea, reconoció esta semana que el gobierno de Chile va a seguir apostando por los cultivos transgénicos para no dejar al país en desventaja comercial y de desarrollo a nivel internacional. Además, quiso dejar claro que esta línea sigue la posición actual en la que los cultivos transgénicos ya son una realidad en el país. Chile cultiva a día de hoy más de 25 mil hectáreas de semillas transgénicas.
Según recoge el Diario La Tribuna de los Ángeles, José Antonio Galilea afirmó que no apostar por esta tecnología y no adoptar todas las medidas legales necesarias para su impulso significaría “aumentar las desventajas de nuestros agricultores frente a los competidores extranjeros. No es posible que nos siga rigiendo una normativa que además de insuficiente es completamente absurda”.
El pasado 3 de marzo el Gobierno chileno anunció una iniciativa legislativa enviada al Congreso para la regulación del mercado nacional de transgénicos, la cual permitirá su uso en la actividad agrícola local para abastecer el mercado interno (actualmente este mercado está abastecido con transgénicos importados).
Los agricultores chilenos pueden cultivar semillas sólo para la exportación. “Les está prohibido comercializar productos que provienen de esta tecnología en el mercado interno, pero la paradoja de esto es que importamos productos que fuera con componentes transgénicos y los consumimos. Un escenario tan absurdo como este no sólo genera competencia desleal para los agricultores, además constituye para los consumidores un auténtico engaño”, explicó José Antonio Galilea,
Sobre la nueva normativa, el ministro de agricultura matizó que con ella “no se pretende incorporar la ingeniería genética a la agricultura chilena porque ya está incorporada a día de hoy, sólo regularlo”.