Un reciente estudio realizado por las revistas agrícolas más destacadas de la Unión Europea revela que los agricultores comunitarios siguen descontentos con las limitaciones en el acceso a la tecnología agraria, especialmente con los cultivos transgénicos. La sensación general de los agricultores es que las restricciones hacia esta tecnología les cierra las puertas para competir internacionalmente en condiciones de igualdad.
El estudio, realizado por la revista británica Farmers Weekly y la neerlandesa Boerderij, dio la oportunidad a los agricultores de expresar sus opiniones sobre las posibles soluciones para hacer frente a los retos alimenticios del futuro.
EuropaBio, quien se ha hecho eco del estudio, resalta el reconocimiento de los agricultores hacia los cultivos transgénicos como una de las herramientas más importantes para hacer frente al desafío de alimentar a una población mundial en constante crecimiento.
El 37,1 % de los participantes considera que esta tecnología es la mejor vía para hacer frente a este hecho, la más popular de los cinco factores clave presentados. Los votos restantes se dividieron entre la más amplia experiencia a través de la educación y la formación (20,3%), la inversión en investigación y desarrollo (18%), la eliminación de las barreras al comercio (14,7%), y la intervención estatal en la producción de alimentos (10%).
El director de Biotecnología agrícola en EuropaBio, Morten Nielsen, afirmó que “a lo largo de la historia, los agricultores han utilizado las nuevas tecnologías con el fin de satisfacer las necesidades de la sociedad, por lo que estos resultados demuestran que las cosas no han cambiado tanto. La seguridad alimentaria y el cambio climático serán dos de los principales desafíos a los que el mundo se enfrentará en el siglo XXI, y esto hará necesario que se realicen cambios significativos en la manera de producir alimentos. Esta encuesta refuerza el mensaje de muchos agricultores europeos que han estado pidiendo el acceso a los cultivos transgénicos durante varios años.”
En la actualidad, más de 13 millones de agricultores de todo el mundo cultivan transgénicos en 125 millones de hectáreas de tierra. Más productos modificados genéticamente están en trámite de aprobación, incluido los cultivos que pueden tolerar condiciones climáticas extremas como la sequía y las inundaciones. En Europa, sin embargo, sólo uno un cultivo transgénico, el maíz resistente al taladro, ha sido autorizado para el cultivo, el resto han sido bloqueados por el sistema normativo de la Unión Europea que impide su cultivo pero permite su importación.