La Autoridad Europea de Seguridad Alimentaria (EFSA) ha comenzado una serie de reuniones y contactos para escuchar a todos los actores implicados en el mundo de la mejora genética y los organismos modificados genéticamente (OMG). En la última celebrada el pasado 14 y 15 de septiembre se abordó la evaluación de riesgos, y se apostó por abrir este proceso e integrar las preocupaciones sociales.
El encuentro fue inaugurado por la directora ejecutiva de la EFSA,Catherine Geslain-Lanéelle, quien señaló que “el campo de los OMG se caracteriza por una gran divergencia de opinión entre los diferentes actores, la baja aceptabilidad social y los diferentes puntos de vista sobre los beneficios y beneficiarios de la tecnología “.
El el director general de Sanidad y Consumo de la CE, Robert Madelin, afirmó que se necesita “fortalecer y racionalizar los procesos de evaluación de riesgos de los OMG para aumentar su eficiencia y la transparencia”.
En representación de la industria de la biotecnología, Willy De Greef , miembro de Europabio (Asociación Europea de Bioindustrias), pidió que la experiencia en el uso seguro de los cultivos transgénicos sea tenida en cuenta en la evaluación del riesgo, y pidió una distinción más clara entre la investigación de riesgo y la evaluación de riesgo.
Por su parte, Geslain-Lanéelle explicó que el papel de la EFSA es el de proveer de asesoramiento científico sobre OMG, e insistió en que “la EFSA no es ni pro ni anti transgénicos. Estamos aquí no sólo para informar sino también para escuchar y aprender”.
La EFSA afirmó que tendrá en cuenta las aportaciones de la CE, los Estados miembros y las partes interesadas a la hora de finalizar la actualización de sus directrices. Además, especificaron que tienen previstas reuniones con las ONG para el mes de octubre para continuar el diálogo sobre estas cuestiones específicas.
La Autoridad Europea de Seguridad Alimentaria (EFSA) ha comenzado una serie de reuniones y contactos para escuchar a todos los actores implicados en el mundo de la mejora genética y los organismos modificados genéticamente (OMG). En la última celebrada el pasado 14 y 15 de septiembre se abordó la evaluación de riesgos, y se apostó por abrir este proceso e integrar las preocupaciones sociales.
El encuentro fue inaugurado por la directora ejecutiva de la EFSA,Catherine Geslain-Lanéelle, quien señaló que “el campo de los OMG se caracteriza por una gran divergencia de opinión entre los diferentes actores, la baja aceptabilidad social y los diferentes puntos de vista sobre los beneficios y beneficiarios de la tecnología “.
El el director general de Sanidad y Consumo de la CE, Robert Madelin, afirmó que se necesita “fortalecer y racionalizar los procesos de evaluación de riesgos de los OMG para aumentar su eficiencia y la transparencia”.
En representación de la industria de la biotecnología, Willy De Greef , miembro de Europabio (Asociación Europea de Bioindustrias), pidió que la experiencia en el uso seguro de los cultivos transgénicos sea tenida en cuenta en la evaluación del riesgo, y pidió una distinción más clara entre la investigación de riesgo y la evaluación de riesgo.
Por su parte, Geslain-Lanéelle explicó que el papel de la EFSA es el de proveer de asesoramiento científico sobre OMG, e insistió en que “la EFSA no es ni pro ni anti transgénicos. Estamos aquí no sólo para informar sino también para escuchar y aprender”.
La EFSA afirmó que tendrá en cuenta las aportaciones de la CE, los Estados miembros y las partes interesadas a la hora de finalizar la actualización de sus directrices. Además, especificaron que tienen previstas reuniones con las ONG para el mes de octubre para continuar el diálogo sobre estas cuestiones específicas.