La Asociación Nacional de Obtentores Vegetales (ANOVE) celebró ayer en Madrid su Asamblea General en la que participó Samuel Juarez, Vocal Asesor en el Ministerio de Agricultura Pesca y Alimentación (MAPA). En su intervención apostó por la ciencia para afrontar los retos a los que se enfrenta a día de hoy la producción de alimentos. “Los retos de la agricultura y la alimentación exigen una apuesta clara por la investigación y la innovación”. También puso de manifiesto que la seguridad alimentaria ha regresado a la primera línea de la política mundial, y que debe compatibilizarse con las exigencias que en materia de sostenibilidad se derivan de los objetivos de desarrollo sostenible de la Agenda 2030.
Samuel Juarez resaltó que la pandemia y la invasión de Ucrania han originado serias distorsiones en los mercados mundiales de energía, fertilizantes y alimentos, y que están forzando una reconfiguración de la geopolítica mundial. Explicó que avanzamos hacia un mundo multipolar, en el que el control de las cadenas de suministros es un elemento estratégico fundamental. Además, el evento contó con una mesa redonda en la que expertos analizaron la búsqueda de soluciones a los retos de la cadena de valor.
En ella, el director general de Anove, Antonio Villarroel, recordó que estamos viviendo un momento crucial en la Unión Europea (UE) porque se están debatiendo dos regulaciones clave para la actividad de I+D+i en el desarrollo de nuevas variedades vegetales. Actualmente en la UE, las variedades obtenidas con las nuevas herramientas de edición genética deberían pasar por un proceso largo y costoso para ser autorizadas, proceso que no es necesario en otras partes del mundo.
Esto hace que en la práctica sea inviable su registro, en un momento en que es esencial disponer de todas las técnicas posibles que permitan desarrollar variedades adaptadas a condiciones climáticas extremas derivadas del cambio climático. Variedades que nos ayuden a cumplir los Objetivos de Desarrollo Sostenible y las políticas europeas como el Pacto Verde o la estrategia Farm to Fork.
APORTACIONES DE LA MEJORA VEGETAL
Miguel Hernández, del Institut Cerdá, explicó algunas de las conclusiones del informe que están desarrollando sobre las aportaciones en los próximos años de la mejora vegetal. Resaltó la necesidad de incrementar nuestra seguridad alimentaria. “Europa es deficitaria en energía, minerales… y la alimentación es uno de los aspectos donde nuestra dependencia puede ser menor”. Sin embargo, “nos encontramos ante el riesgo de frenar nuestra capacidad innovadora e incrementar nuestro riesgo de suministro”. Reconoció que nos podemos ver en esa situación de una forma paradójica, ya que “nos podemos encontrar consumiendo alimentos producidos por terceros con técnicas que nosotros no consideramos buenas”.
La mesa contó también con la participación de José Antonio Sobrino, Subdirector General de Medios de Producción Agrícola y Oficina Española de Variedades Vegetales en el MAPA, que remarcó la importancia del sector obtentor a nivel mundial, y de manera particular en un país donde la innovación es una de nuestras líneas estratégicas por la gran representatividad en nuestro territorio de las empresas que operan en este sector.
Durante la Asamblea se hizo hincapié en la necesidad de comunicar a la sociedad el valor del conocimiento y la innovación varietal, dando a conocer las aportaciones de la obtención vegetal y el esfuerzo que las empresas obtentoras están realizando en I+D. Las entidades asociadas en ANOVE invirtieron el pasado ejercicio en I+D+i entre el 20% y el 30% de su facturación. Según datos de la Comisión Europea, el porcentaje de inversión de las compañías dedicadas a la mejora vegetal supera incluso al que realizan las de automoción, farmacéutica, aeroespacial o las de tecnologías de la información.
