Miniatura infografia PG EconomicsEn el decimonoveno año de adopción continuada de los cultivos modificados genéticamente en todo el mundo, la biotecnología agraria sigue proporcionando beneficios económicos y ambientales. En 2014, los cultivos transgénicos consiguieron un incremento de 16 mil millones de euros de los ingresos de los agricultores, lo que equivale a una media de 90 euros por hectárea. Si contamos los 19 años de cultivo global (1996-2014) el aumento de la renta agraria total superaría los 134 mil millones de euros.

Así se desprende del último informe elaborado por el PG Economics: ‘Cultivos transgénicos: impactos socio-económicos y ambientales a nivel mundial 1996-2014′. El estudio resalta que en 2014 la biotecnología agraria ha permitido desarrollar una agricultura más productiva, con mayores ingresos para los agricultores y con un menor impacto sobre medio ambiente. La mayoría de estos beneficios siguen recayendo sobre los agricultores. Entre las conclusiones del informe destacan las siguientes:

MENOR PRESIÓN SOBRE RECURSOS NATURALES

Entre 1996 y 2014, la biotecnología agraria fue responsable de una producción mundial adicional de:

  • 158,4 millones de toneladas de soja
  • 321,8 millones de toneladas de maíz
  • 24,7 millones de toneladas de fibra de algodón
  • 9,2 millones de toneladas de colza

La biotecnología agraria ha permitido a los agricultores una producción extra de 541,1 millones de toneladas sin tener que incrementar la superficie de cultivo.

CONTRIBUCIÓN A LA SEGURIDAD ALIMENTARIA

Si la biotecnología agraria no hubiera estado a disposición de los 18 millones de agricultores que apostaron por ella en 2014, mantener la producción global en los niveles de 2014 habría requerido plantaciones adicionales de:

  • 7,5 millones de hectáreas de soja
  • 8,9 millones de hectáreas de maíz
  • 3,7 millones de hectáreas de algodón
  • 0,6 millones de hectáreas de colza.

Esta superficie total de 21 millones de hectáreas es equivalente al 12% de la tierra cultivable en los Estados Unidos, al 33% de la tierra cultivable en Brasil, o al 14% del área de cultivo en China.

 MEJORAS AMBIENTALES

La biotecnología agraria ha contribuido a reducir significativamente la liberación de emisiones de gases de efecto invernadero derivadas de las prácticas agrícolas. Esto se debe a un menor uso de combustibles y a una acumulación adición de carbono en el suelo derivada de la reducción de labores de laboreo. La reducción de emisiones de gases de efecto invernadero fue en 2014 de 22,4 mil millones kilos, el equivalente a retirar 10 millones de coches de la circulación durante un año¡.

La biotecnología agraria ha reducido los tratamientos con pesticidas de 1996 a 2014 en un total de 581 millones de kilos. Cantidad equivalente al total de pesticidas aplicados en los cultivos en China durante más de un año. Como resultado, se ha disminuido el impacto ambiental asociado a los herbicidas e insecticidas en un 18,5%.

 >> INFORME PG Economics <<

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