La industria del vino en EEUU ha entrado en el mundo de la ingeniería genética gracias a un experimento en viñedos, con una modificación de la levadura diseñada para eliminar sustancias químicas en el vino rojo que se creen que provocan, en algunas personas, dolores de cabeza, incluyendo las migrañas, según recoge la lista de distribución de noticias Agbioworld.
Este estudio científico ha jugado un importante papel al mejorar la calidad de las uvas y los vinos. Pero la ingeniería genética (en este caso introducir dos genes de ADN en especies de levadura) es un nuevo reto para la industria. “Como industria, definitivamente estamos interesados en el estudio en lo que se refiere a la ingeniería genética, dijo Paul Dolan, productor de vino y presidente de Wine Institute, el grupo líder en la industria de California.
De momento, la nueva levadura promete una solución para el dolor de cabeza causado por el vino. Alrededor del 13% de los americanos sufre de migrañas, según el Nacional Headache Foundation. “Normalmente, a los pacientes que sufren de migraña se les recomienda que eviten el vino rojo”, dijo Marco Vespignani un médico naturópata del Institute for Restorative Health en Davis (Estados Unidos).
Un poco de vino hecho con la levadura llamada ML01 llegará a los consumidores este año, según Jason Rodríguez, especialista en productos de vino de American Tartaric Products Inc., el distribuidor californiano de la levadura. Él negó que los vinos se identificaran por marcas y que llevaran algún tipo de identificación. Las regulaciones estadounidenses no requieren especificaciones que detallen cuándo un alimento contiene ingredientes modificados genéticamente.
Nuevas variedades de trigo resistente a la sequía
Otra línea de investigación en torno a los transgénicos la protagoniza el trigo. Los agricultores que cultivan este cereal podrían ahorrarse millones de dólares gracias a la labor de un grupo de científicos del Department of Primary Industries (DPI), que descubrieron nuevas líneas resistentes a la sequía en el trigo. La semana pasada, en una conferencia sobre agricultura biotecnológica, el Ministro de Innovación australiano, John Brumby, anunció que los científicos de Victoria (Australia) habían identificado variantes de pan de trigo que producían el 20% más de trigo que las variedades usadas actualmente en condiciones de sequía.
“El trigo es el mayor cultivo en Australia; las exportaciones de trigo de Victoria tuvieron un valor de 384 millones de dólares entre 2004 y 2005. Sin embargo, el trigo australiano crece bajo condiciones lluviosas y la falta de agua frecuentemente reduce la producción de los cultivos.”, señaló el Sr. Brumby. “Con al menos la mitad de la producción australiana de trigo sujeta a sequía cada año, estas nuevas variedades podrían hacer ganar a los agricultores australianos 270 millones de dólares más al año. Descubrimientos revolucionarios como este muestran el potencial de la innovación de la agricultura biotecnológica en la mejora en los recursos alimenticios mundiales, así como la riqueza de la experiencia en esta área que tienen los científicos de Victoria.”
Investigadores y científicos pertenecientes al DPI, que depende del International Maize and Wheat Improvement Centre de México, introdujeron una variante de una hierba familiar salvaje del pan en condiciones secas. Crearon un híbrido con uno de los familiares salvajes y trigo moderno, y produjeron trigo sintético hexaploide, que por entonces se cruzaba con trigo común.
Bob Cameron, Ministro de Agricultura de Victoria, dijo que el descubrimiento reveló que parte del trigo sintético derivado contenía múltiples resistentes a algunas de las mayores amenazas del trigo australiano, en las que se incluyen óxidos, enfermedades de las hojas y nematodos. “Parte, no es solo tolerante a la sequía, sino también a las sales de las tierras.”