El maíz es uno de los cultivos más importantes del mundo. En África, es el alimento básico de más de 300 millones de personas. En otros países en vías de desarrollo, el maíz puede no ser la principal fuente de alimentación, pero es uno de los cultivos que realmente puede proporcionar alimentos a una población hambrienta y malnutrida, especialmente en los niños.

A fin de luchar contra esta dura y crítica realidad, el International Maize and Wheat Improvement Center (CIMMYT) ha desarrollado el maíz biofortificado, conocido como maíz de calidad proteínica o quality protein maize (QPM) , una variedad cuyo sabor es igual al del convencional pero que aumenta la producción de aminoácidos necesarios para la síntesis de proteínas en los seres humanos.

El estadístico Nilupa Gunaratna, miembro de la Fundación Internacional de Nutrición, dirigió un equipo formado por otro estadístico, un economista, un nutricionista y un mejorador de plantas, para analizar el impacto del QPM en los niños desnutridos.

En su informe, en el que realiza un análisis exhaustivo de la situación basándose en la calidad de la proteína del maíz, los autores explican que cuando los niños malnutridos consumen maíz QPM el crecimiento de estatura se incrementa en un 9%, y el incremento del peso aumenta en un 12%.

Pese a los beneficios nutricionales demostrados del maíz QPM, la aceptación de este maíz sigue siendo difícil. De los 90 millones de hectáreas de maíz cultivadas en México, América Central, África Subsahariana y Asía, se estima que como máximo sólo un 1% es QPM.

Accede al artículo completo publicado por el CIMMYT

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