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La Asociación de Ganaderos de vacuno de Carne (Asoprovac) entregó el pasado lunes, 4.000 cartas en el Ministerio de Medio Ambiente y Medio Rural y Marino (MARM). En ellas se denuncia una caída del 20% de la producción nacional en 2008, en consecuencia de la actual crisis del sector.
Entre sus peticiones reclaman la incorporación al mercado europeo de materias primas de aquellos organismos genéticamente modificados (OGM) considerados seguros tanto por la Agencia Europea de Seguridad Alimentaria, como por la Organización Mundial de la Salud (OMS).
A las puertas del Ministerio el presidente de Asoprovac, Albert Juanola, mostraba ante los medios de comunicación su decepción tanto por la “impasividad” del Gobierno ante la situación “dramática” que atraviesan los sectores ganaderos, como por la actitud de despreocupación del equipo del MARM que “no se ha dignado a recibirles”.
Juanola ha explicado que con la entrega de las 4.000 cartas reivindicativas, firmadas a título individual por ganaderos profesionales, el sector ha querido trasladar al Gobierno un problema real “que el ejecutivo no quiere ver” y que supondrá la desaparición a corto plazo de un número importante de pequeñas y medianas explotaciones de vacuno.
Además, ha recordado que hace año y medio todas las asociaciones de ganaderos elaboraron un informe para el MARM, a raíz del incremento del precio de la materia prima, donde ya anticipaban la situación actual, “de ruina y quiebra” sin que haya sobre la mesa no un plan estratégico, ni de abandono ni apuesta por el sector.
De este modo, el sector reivindica la incorporación al mercado europeo de materias primas de aquellos organismos genéticamente modificados (OGM) considerados seguros tanto por la Agencia Europea de Seguridad Alimentaria, como por la Organización Mundial de la Salud (OMS), haciendo hincapié en que de no hacerse no deberían dejar que entrara en el mercado comunitario carne de terceros países donde si se utilizan para alimentar al ganado.
También piden que se bonifique el kilo de pienso consumido, según el tipo de granja, por considerar que al no haber existencia de cereal, a nivel comunitario y nacional, cuando subieron los precios ha incrementado enormemente el volumen de pérdidas ocasionadas a los ganaderos.
Además, demandan que se lleve a cabo de forma inmediata una campaña informativa sobre los beneficios del sistema de producción europeo, para estimular al consumidor a la compra de carnes producidas bajo un estándar de calidad y seguridad alimentaria diseñado para cubrir sus exigencias.
Así, la carta, de la que se hará eco, a través de iniciativas parlamentarias el senador de Convergencia i Unió, Joan María Roig i Grau, reclama la activación y funcionamiento a pleno rendimiento de los puestos de inspección fronteriza (PIF) sobre las carnes procedentes de terceros países.
