Las Auxinas son hormonas vegetales claves que controlan una serie de procesos que van desde la formación del embrión en la semilla hasta la ramificación de la planta en crecimiento. Anteriormente se creía que el principal mecanismo de señalización de la auxina operaba en el núcleo celular y actuaba solo regulando la transcripción génica. Ahora, científicos del Instituto de Ciencia y Tecnología de Austria (IST Austria) han demostrado que existe otro mecanismo que permite una rápida adaptación de la dirección de crecimiento de la raíz.
Cuando las semillas germinan, sus raíces se doblan para crecer más profundamente en el suelo. Con el fin de hacer esto, el crecimiento celular continúa en un lado de la raíz mientras se inhibe en el otro. Se sabía que esta inhibición era desencadenada por las auxinas y que se producía muy rápidamente, pero los tiempos de reacción exactos eran difíciles de medir.
Usando una configuración innovadora, los investigadores ahora han podido medir el tiempo que las raíces necesitan para reaccionar a los cambios en la concentración de auxinas con precisión. Llegaron a la conclusión de que la adaptación extremadamente rápida de la tasa de crecimiento era demasiado rápida como para ser explicada por el mecanismo de transcripción de genes, y por lo tanto debe implicar un mecanismo de percepción correspondientemente rápido.
Según los investigadores, el nuevo mecanismo no es del todo desconocido. Los componentes de la vía estudiada, el receptor TIR1, son necesarios para el mecanismo recientemente descubierto. Los científicos explican que pudieron probar que la señalización no es transcripcional, y que han visto que se necesitan componentes de la ruta transcripcional original.
[FUENTE: IST Austria]