La segunda sesión de las ‘II Jornadas sobre transgénicos agrícolas’, celebrada en Salamanca el pasado viernes, profundizó en el papel de los cultivos biotecnológicos a nivel mundial. Un amplio debate de expertos en la materia en el que se pudieron ver distintas posturas sobre la aplicación y beneficios de esta tecnología.

Convocadas por la Asociación de Biotecnología de Salamanca (ABSAL) en colaboración con la Federación Española de Biotecnólogos, las jornadas han confirmado en su segunda edición su éxito congregando a más público que en su primera edición y convirtiéndose en un foro de referencia en el país sobre biotecnología agraria.

José Miguel Mulet Salort, Investigador en el IBMCP y profesor de Biotecnología en la UPV, resaltó que “ninguna práctica agraria es ecológica ya que la agricultura siempre es agresiva con el medio ambiente.” En esta línea afirmó que “cualquier práctica agrícola debe tener un valor científico y suponer una mejora respecto a sus antecedentes.”

“Ser antitransgénico es como montar hoy en día un club de ‘Operación Triunfo’, llegas diez años tarde.” José Miguel Mulet Salort.

Alejandro Martínez Peña, Investigador de Idebio S.L., defendió la vuelta a las prácticas agrícolas tradicionales rechazando cualquier tipo de tecnología aplicada a la agricultura. Desde su punto de vista “los transgénicos son un suicidio histórico”, una postura ideológica que no logró justificar científicamente. El investigador afirmó que si en el mundo hay pobreza es por factores que nada tienen que ver con la agronomía, por lo que considera que usar la agricultura como un elemento de lucha contra el hambre es un error.

Por su parte, Soledad de Juan Arechederra, Directora de la Fundación Antama, afirmó que “es indignante que podamos importar transgénicos que no podemos cultivar pese a que científicamente esté demostrado que son seguros.” La Ingeniero Agrónomo defendió el derecho de los agricultores a cultivar transgénicos una vez se haya demostrado que son seguros, y no encontrarnos con retrasos de autorizaciones acumulados de más de 44 años como acumula la Unión Europea.

“Francia y Alemania prohíbe los cultivos biotecnológicos porque no les interesa económicamente, no porque haya evidencias científicas que lo justifiquen.” Soledad de Juan Arechederra.

Soledad de Juan quiso resaltar que es muy importante no confundir el hambre en el mundo con los cultivos modificados genéticamante ya que “el hambre es un factor mucho más complejo en el que intervienen cuestiones políticas.” En esta línea resaltó que es necesario una apuesta fuerte por todas formas agrarias ya que tanto “la agricultura convencional, ecológica y biotecnológica son completamente compatibles.”

Julio César Tello Marquina, Catedrático de Producción Vegetal en la Universidad de Almería, afirmó que “mientras discutimos sobre cultivos transgénicos y ecológicos el Gobierno de España está evitando hacer una apuesta firme por el desarrollo rural,” algo que está retrasando el progreso del sextor. Desde su punto de vista “es absurda la guerra entre agriculturas ya que no hay más agricultura que la que se practica con sentido común.”

>> Crónica de la primera sesión de las ‘II Jornadas sobre Transgénicos Agrícolas’ <<

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