Un nuevo estudio dirigido por científicos de la Universidad de California en Berkeley, en los Estados Unidos, revela cómo las plantas de sorgo controlan su genoma para sobrevivir a la sequía. La planta activa y desactiva algunos genes al primer signo de escasez de agua, y nuevamente cuando el agua regresa, para sobrevivir cuando su entorno se vuelve áspero y árido.

Un conjunto de datos masivo de 400 muestras de plantas de sorgo cultivadas durante 17 semanas en campos abiertos en el Valle Central de California, revela que el sorgo modula la expresión de un total de 10,727 genes, o más del 40% de su genoma, en respuesta al estrés por sequía. Muchos de estos cambios ocurren una semana después de que la planta pierde un riego semanal o cuando se riega por primera vez después de semanas sin riego.

Para llevar a cabo la investigación, el equipo cultivó plantas de sorgo bajo tres condiciones de riego diferentes: sequía previa a la floración, sequía posterior a la floración y aplicaciones controladas de agua. Lo hicieron durante tres años consecutivos en el Centro de Investigación y Extensión Agrícola (KARE) UC Kearney en Parlier, California.

“El sorgo es realmente tolerante a la sequía, y si aprendemos cómo puede ser tan tolerante ella entonces quizás podamos ayudar a otras plantas a sobrevivir de la misma manera”, dijo Peggy Lemaux, especialista en extensión cooperativa de la Universidad de California del Departamento de Biología Vegetal y Microbiana y coautor del artículo publicado en la revista Proceedings of the National Academy of Sciences.

“Controlamos muy cuidadosamente las condiciones de riego, y tomamos muestras de todo el período de desarrollo del sorgo, por lo que los investigadores en realidad podrían usar estos datos no solo para estudiar el estrés por sequía, sino también para estudiar el desarrollo de las plantas”, afirmó Lemaux.

Más información en este enlace.

Compartir en redes sociales