Madrid, 16 de abril de 2010.- La Asociación PRObio, organización formada por agricultores de todas las ideologías y que cuenta con adscripciones a diferentes sindicatos agrarias, rechazamos rotundamente los movimientos antitransgénicos que están teniendo lugar en los últimos días promovidos por determinadas organizaciones. No podemos permitir que hablen en nombre de los agricultores españoles para desacreditar una tecnología que usamos desde hace años con responsabilidad y eficacia.

Desde la Asociación PRObio no podemos permitir que diferentes organizaciones, algunas agrarias, ataquen indiscriminadamente el cultivo de semillas transgénicas basándose en información incorrecta y alarmista. Como organización que aglutina a los agricultores que apuestan la biotecnología agraria en España, rechazamos las posturas y decisiones que no se basan en la ciencia, sino en intereses ideológicos y económicos, para prohibir cultivos biotecnológicos a pesar de no haberse esgrimido ninguna evidencia científica que justifique dichas prohibiciones.

La Asociación PRObio también rechaza los intentos de confundir a los ciudadanos con declaraciones de zonas libres de cultivos modificados genéticamente o de amenazas a los agricultores que los cultivan, que se están acometiendo desde algunas  Administraciones regionales y locales, y que llevan al desconcierto de la ciudadanía.

Por todo ello, desde la Asociación PRObio afirmamos que:

  • La Biotecnología agrícola es una herramienta para la agro-alimentación de la que no podemos prescindir. Tras años de experiencia de cultivo, podemos afirmar que los cultivos transgénicos tienen una mayor eficiencia productiva con un impacto positivo en la biodiversidad debido a la disminución de superficie que es necesaria poner en cultivo.
  • Las nuevas tecnologías han permitido que nunca hayamos comido mejor ni más seguro que ahora. Esto es posible gracias a la puesta en práctica de multitud de tecnologías, desde las utilizadas en la agronomía hasta la industria alimentaria. Todas ellas necesarias y de las que no podemos prescindir.
  • El sector agrario español necesita poder competir en condiciones de igualdad con el resto de países del mundo, por lo que demandamos abiertamente acceso a aquellas tecnologías que no están autorizadas para nuestro uso pero cuya producción traemos del extranjero.
  • La seguridad de los cultivos transgénicos está garantizada por la más estricta e independiente evaluación científica, realizada por la Autoridad Europea de Seguridad Alimentaria y por las agencias de seguridad, sanidad y medio ambiente presentes en cada país comunitario.

Como organización que aglutina a los agricultores hacemos un llamamiento a la responsabilidad, basada en la más estricta seguridad avalada por las Autoridades competentes. Exigimos el derecho de los agricultores a poder elegir el cultivo de aquellas semillas que sean más beneficiosas para nuestra actividad, al igual que hacen nuestros homólogos en otros Estados, y apoyamos el esfuerzo de las organizaciones acreditadas para garantizar la bondad ambiental y sanitaria de dichos avances.

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